DREAM THEATER: LA ALINEACIÓN DE ORO ATERRIZA EN BUENOS AIRES

Mucha es la emoción que nos empuja a presentarnos hoy, 19 de diciembre, en el Movistar Arena. La principal es la más lógica, Dream Theater tiene show pactado y el regreso a los parches del amadísimo Mike Portnoy, tras 15 años, genera una expectativa enorme en sus fanáticos. Los más antiguos creían que este regreso no sucedería y quieren volver a ver la formación de oro que supo dar numerosos shows en Buenos Aires a lo largo de la primer década de los 2000. Los fanáticos más nuevos van a ver esta alineación por primera vez. 

Todos nos encariñamos mucho con Mike Mangini, ya que su paso por la banda fue muy aclamada, pero en el fondo de nuestro corazón no perdíamos esperanza del regreso de Portnoy.

Otro punto a destacar que genera tanta ansiedad sobre este show es la particularidad de contar con un campo de pie. Tratándose de Dream Theater es una rareza, ya que la normalidad de sus shows suele ser un campo con asientos numerados; donde se pierde ese factor de público eufórico tan necesario en Buenos Aires, donde tiene mucho protagonismo la intensidad entre los asistentes. Punto que conocemos de sobra de este lado del mundo!

La última vez que pasó esto fue en Mandarine Park en 2014, donde el público se pudo dar el lujo de saltar sin restricciones y poguear en temas poderosos como "The Enemy Inside", del disco homónimo que venían presentando en dicha gira.

Los invitados de esta noche son los locales Lörihen, que con su Power Metal hacen brillar los primeros instantes de esta velada, y tienen una cantidad considerable de seguidores afines que no dejan pasar la chance de corear las canciones clásicas de su repertorio!

A las 21 hs puntual, las luces del estadio se apagan, empezamos a escuchar el tape intro de "Metropolis Part. 1: The Miracle and the Sleeper" y sabemos que se viene una introducción potente y a la vez nostálgica. Al momento que parte el tema, cae el telón y vemos en escena a los 5 grandes: Petrucci, LaBrie, Myung, Rudess y Portnoy. Nuestra primera imágen en tierras porteñas del regreso de la formación dorada.

Los saltos, coreadas, y pogos no se hacen esperar. Cada parte de teclado, guitarra y hasta de bajo, son coreadas por el público que deja en evidencia la euforia de este regreso triunfal.

La velada sigue de la forma que sigue la historia de "Metropolis", con "Overture 1928" pegado a "Strange Déjà Vu" del discazo "Metropolis Part. 2: Scenes From a Memory". Disco que, curiosamente, esta de 25 aniversario. No serán los únicos de esa majestuosa placa que suenen a lo largo del show!

"The Mirror" aparece con ese violento breakdown inicial y la característica línea de teclado es coreada por, prácticamente, todo el estadio al unísono. Como nos tienen acostumbrados, el cierre de este tema fue con el fragmento de su track hermano del disco, "Lie".

Para sorpresa de muchos, el siguiente tema es "Panic Attack" (donde se hizo evidente que el bajo también puede ser coreado por el público argento), seguido de "Barstool Warrior". Curioso, al tratarse de un tema de "Distance Over Time", de la era Mangini. Y, según tengo entendido, Portnoy metió mucha mano en la elección de temas del setlist de la gira. Por lo que queda demostrado que seguía muy de cerca el trabajo de sus ex compañeros.

"Hollow Years" llega para dar un momento emotivo, en el cual LaBrie pide a los asistentes prender las linternas de sus celulares. Quedando una hermosa postal del estadio "estrellado". 

Para volver a los riffs agresivos y con la etiqueta de Metal grabada, el setlist continúa con "Constant Motion" y "As I Am", donde los pogos están por doquier y, si te descuidás, podés quedar en medio de uno!

El primer acto finaliza y viene el famoso receso de 15 min que es habitué en sus presentaciones. 

La banda vuelve a escena para mostrar uno de sus más recientes singles: "Night Terror". Que cosechó varias escuchas y fieles oyentes, ya que veo mucha gente cantándolo verso por verso (sí, yo soy uno de ellos jaja). 

"Under a Glass Moon" y "This Is the Life" pasan acompañados de hermosas gráficas en las pantallas del escenario, seguido de "Vacant", "Stream of Consciousness" y la que podría ser consideradaa joya de la velada: "Octavarium" interpretado en su totalidad. Los 24 minutos de track del tirón, dejándonos boquiabiertos a todos por semejante despliegue de maestría. 

El escenario es abandonado una vez más por los artistas, pero falta el encore. Y el famoso clip de la película "Mago de Oz" del "there's no place like home" nos hace sospechar por donde viene la mano. Los hits de "Metropolis Part. 2" no cesan, y "Home" sale a escena con toda la intensidad de sus riffs.

La noche está llegando a su fin, el reloj marca que ya van pasando las 3 hs de show, pero esto no termina aún. "The Spirit Carries On" pone a todos los asistentes en mood emotivo, aún más que "Hollow Years"; a mi alrededor muchos lo cantan con lágrimas en los ojos. 

Y, como no podía ser de otra forma, el hitazo elegido para cerrar un show de casi 3:15 hs es "Pull Me Under".

Poco más queda para decir, el rumor de que la publicación de "Parasomnia" (su próximo álbum) el 7 de febrero traería a la banda nuevamente el próximo año, va tomando mucha fuerza. De ser así, nos darían la dosis necesaria del regreso de esta formación para los que esperamos tanto tiempo. Pero, a decir verdad, existe dosis necesaria? Podrían venir todos los años y nunca nos cansaríamos de un show de este calibre!

                                                         Por Agustín López 

                                    Fotos Cortesía Candela Allende